Jutba pronunciada en Sevilla, en la llamada "Mezquita de los Andaluces", el 21 de mayo de 2010
1ª Parte: Sobre la muerte
لا اِلـهَ اِلاَّ اللهُ الْعَظيمُ الْحَليمُ لا اِلـهَ اِلاَّ اللهُ رَبُّ الْعَرْشِ الْكَريمُ اَلْحَمْدُ للهِ رَبِّ الْعالَمينَ
la ilaha illal lahu al‘athimul halimu la ilaha illal lahu rabbul ‘arshil karimul hamdu lillahi rabbil ‘alamin
No hay divinidad sino Allah, el Infinito, Prudentísimo. No hay divinidad sino Allah, Señor del Trono Glorioso. Alabado sea Allah, Señor de los universos.
اَلْحَمْدُ للهِ الاَوَّلِ قَبْلَ الاِنْشاءِ وَالاِحْياء
alhamdu lillahil auuali qabla l'insha'i ual ihia'i ual 'ajiri ba'da fana'il ashia'i
Alabado sea Allah, el Primero anterior a la creación del universo y los seres vivos y el Último luego de la desaparición de todas las cosas.
اَلْحَمْدُ للهِ الَّذى لَمْ يُشْهِدْ اَحَداً حينَ فَطَرَ السَّمواتِ وَالاَرْضَ
alhamdul lil lahil ladhi lam iushhid ahadan hina fataras samauati ual arda
Alabado sea Allah, aquel que no tuvo testigos cuando creó los cielos y la tierra
وَلاَاتَّخَذَ مُعيناً حينَ بَرَأ النَّسَماتِ
ua lat tajadha mu'inan hina bara'an nasamati
y no necesitó ayudante cuando creó los seres.
للّـهُمَّ صَلِّ عَلَى مُحَمَّـدٍ وَآلِ مُحَمَّـد
allahumma salli 'ala muhammadin ua ali muhammadin
Allahumma Bendice a Muhammad y a la Familia de Muhammad
وَصَلَّى اللهُ عَلَى رَسُولِهِ، والأَئِمَّةِ الْمَيامِينَ مِنْ آلِهِ
ua sallallahu 'ala rasulihi ual a'immatil maiamina min alihi
y que Allah Bendiga a Su Mensajero y a los santos Imames de su Familia,
وَسَلَّمَ تَسْـلِيمًا كَثِيـرًا
ua sallama tasliman kaziran
y les otorgue abundante Paz.
صَلَّى اللّهُ عَلَيْهِمْ أَجْمَعِينَ، وَلَعَنَ اللّهُ أَعْداءَ اللّهِ ظالِمِيهِمْ مِنَ الاَ وَّلِينَ وَالاَخِرِينَ
sallal lahu 'alaihim ayma'ina ua la'anal lahu a'da'al lahi thalimihim minal auualina ual ajirina
Allah os bendiga a todos y maldiga a vuestros enemigos.
* * *
AS SALAMU ‘ALAIKUM
Dice el Sagrado Corán en la aleya 185 de Surat Ale ‘Imran
كُلُّ نَفۡسٍ۬ ذَآٮِٕقَةُ ٱلۡمَوۡتِۗ ... وَمَا ٱلۡحَيَوٰةُ ٱلدُّنۡيَآ إِلَّا مَتَـٰعُ ٱلۡغُرُورِ
Kullu nafsin dhaa’iqatu almauti... ua maa alhaiatu-ddunia ‘illah mata’u al gurur.
«Toda alma gustará la muerte… y la vida presente no es sino un objeto de disfrute engañoso»
Decía Imam ‘Ali (P), que trabajáramos para el dunia como si fuésemos a vivir eternamente y trabajáramos para el ahira como si fuéramos a morir mañana mismo.
Todos vamos a morir un día y debiéramos estar dispuestos para ello. Cuando pensamos en hacer un viaje lo preparamos con todo el esmero posible, sin embargo no solemos pensar ni preparar nuestro viaje más importante, nuestro viaje hacia el Paraíso.
Dice el Sagrado Corán en la aleya 8 del Surat al Yuma’a
قُلۡ إِنَّ ٱلۡمَوۡتَ ٱلَّذِى تَفِرُّونَ مِنۡهُ فَإِنَّهُ ۥ مُلَـٰقِيڪُمۡۖ ثُمَّ تُرَدُّونَ إِلَىٰ عَـٰلِمِ ٱلۡغَيۡبِ وَٱلشَّهَـٰدَةِ فَيُنَبِّئُكُم بِمَا كُنتُمۡ تَعۡمَلُونَ
Qul innalmauata-lladi tafirruuna minhu fa’nnahu, mulaqiikum zumma turadduuna ‘ila’alimi algaibi, uashshahadati faiunabi’ukum bimaakuntum ta’maluna
«Di: “En verdad la muerte de la cual huís os encontrará, después retornareis hacia el Conocedor de lo invisible y lo visible y Él os informará de lo que hacíais”»
Después de la muerte todos los caracteres de nuestra personalidad y posición social desaparecerán. Todos nos igualaremos. Nadie escapa a la muerte y nada nos puede ayudar a evitarla. La muerte es la primera etapa de nuestro viaje hacia el Paraíso y prepararnos para ella nos hará más fácil y confortable este viaje.
El Profeta (PBd) y los Imames (P) nos han enseñado como prepararnos para este largo viaje. Un hadiz del Profeta Muhammad nos enseña cuales son las premisas que necesitamos para realizar este viaje y tener éxito.
Un día el Profeta (PBd) estaba sentado con sus compañeros en la Mezquita de Medina y les dijo:
“Hoy quiero plantearos una pregunta. Pero antes de que os la haga, os relataré una historia. Había un hombre en esta ciudad que se enteró que el Ángel de la Muerte estaba por finiquitar su vida. El hombre se inquietó y decidió buscar ayuda. Fue en busca de su mejor amigo y le dijo: Tengo necesidad de tu ayuda. Estoy convencido de que el Ángel de la Muerte está por terminar con mi vida. ¿Puedes ayudarme de alguna forma?.
El amigo le respondió: Mientras estés con vida, haré todo lo posible para reducir tu miseria, pero una vez que el Ángel de la Muerte se lleve tu alma, te diré adiós y nuestra amistad terminará.
El hombre quedó contrariado. Decidió buscar la ayuda de un segundo amigo, y este le dijo: Voy a ayudarte después de la muerte. Me aseguraré que recibas correctamente el ghusul y el kafan. Haré que se rece tu oración mayid y organizaré un buen entierro. Pero después de esto te diré adiós y nuestra amistad terminará.
El hombre se entristeció mucho al oír que su segundo mejor amigo debería dejarlo después de su entierro. Estaría completamente solo en su tumba. Pensó entonces en otro amigo. Fue a verlo y el amigo le dijo: Querido amigo no te voy a decepcionar, voy a ayudarte. Estaré contigo en la tumba. Estaré contigo el Día del Juicio, para ayudarte a llevar a cabo tu viaje hacia el Paraíso de manera confortable y sin problemas. Solamente te abandonaré cuando accedas al Paraíso. El hombre dio las gracias a su real y verdadero amigo y se despidió”.
El Profeta (PBd) terminó así la historia y después preguntó a sus compañeros: “Todos tenemos estas tres clases de amigos. ¿Podéis decirme quienes son estas tres clases de amigos?” Nadie respondió correctamente.
El Profeta explicó entonces la respuesta a la pregunta:
“El primer amigo en la historia es nuestra salud, nuestro dinero y nuestra posición social. Nuestro dinero puede ser nuestro amigo mientras que estamos vivos, pero en cuanto fallecemos, nos deja. El segundo es nuestra familia, parientes, hermanos y hermanas. Nos harán el ghusul nos pondrán el kafan y nos enterrarán, después de lo cual nos dirán su adiós y nos dejarán solos en la tumba. El tercer amigo -el verdadero y real amigo- nos ayudará cuando más necesidad tengamos. Nos ayudará en la tumba y en el siguiente viaje. ¿Quién es este verdadero amigo?.
Es nuestras buenas acciones, nuestras oraciones, nuestros actos de caridad, las donaciones, los ayunos, etc… Las buenas acciones son lo que necesitamos para hacer nuestro viaje hacia el Paraíso más confortable y sin problemas.
Aquel que se prepara para el largo viaje hacia el Paraíso recauda buenas acciones y no solamente riquezas”.
Hermanos, hay que tener presente a diario la realidad y cercanía de la muerte, incluso realizando trucos para recordarlo como tener el kafan o nuestro testamento a la vista, y de esa manera nos concienciaremos de la necesidad de realizar buenas acciones.
El tiempo de nuestra muerte está prescrito cuando nacemos, si bien nosotros no lo conocemos.
El mismo momento de la muerte, el momento en el que el Ángel de la Muerte separa el alma del cuerpo, puede ser tremendamente doloroso. Por ejemplo, un dirigente cruel o injusto, una persona que da un falso testimonio o una persona que causa daño a un huérfano será severamente herido por el Ángel de la Muerte, y un viajero herido no tendrá un viaje confortable hacia el Paraíso.
El Profeta (PBd) y los Imames (P) nos han enseñado varios medios para ayudar a reducir el sufrimiento durante la agonía. Algunos de estos medios son:
El largo y difícil viaje hacia el Paraíso comienza justo alrededor de una hora antes de la muerte, cuando el Ángel de la Muerte viene para separar nuestra alma y terminar nuestra vida en la tierra. Deberíamos estar bien preparados para esta primera etapa del viaje ya que Shaitan, que durante toda nuestra vida intentará desviarnos, viene también a vernos por última vez justo antes de que lo haga el Ángel de la Muerte, y hará todo lo que pueda para destruir nuestra fe en Allah (swt).
¿Por qué el Ángel de la Muerte da una oportunidad a Shaitan para desviarnos en el último momento? ¿Por qué no separa rápidamente nuestra alma? En efecto, Allah (swt) ordena al Ángel de la Muerte que separe rápidamente el alma de los creyentes para evitar que Shaitan los pueda desviar. Pero algunos de nosotros nos resistiremos al Ángel de la Muerte cuando intente separar nuestra alma, porque amamos y estamos excesivamente atados al confort y a los objetos del mundo. Algunos de nosotros amamos excesivamente nuestro dinero y no queremos separarnos de él. Algunos de nosotros no queremos dejar a nuestros hijos. Otros tienen negocios y no soportan perderlos. Un rey no querrá perder su poder y su posición. Están tan atrapados en el engranaje de la vida que se resistirán ante el Ángel de la Muerte cuando intente separarles el alma.
La aflicción que sintamos en el instante en que el Ángel de la Muerte separe nuestra alma dependerá -como hemos dicho- de las buenas o malas acciones que hayamos hecho a lo largo de nuestra vida. ¿Qué hace el Ángel de la Muerte con nuestra alma? El alma será depositada alrededor de nuestro cuerpo. Podrá ver y oír todo lo que ocurre a su alrededor. Sentirá aflicción por su familia y amigos que hacen el ghusul Mayid a su cuerpo sin vida y que finalmente lo entierran en la tumba.
El alma reza por las gentes que hacen el ghusul Mayid a su cuerpo y también por las gentes que participan en su salat mayid y en las ceremonias del entierro. Un alma se quejará a Allah (swt) por los miembros de su familia y amigos que no asisten a su salat mayid y a su entierro. Las plegarias y las lamentaciones de un alma son rápidamente respondidas por Allah (swt). Una vez que el cuerpo es enterrado y que todo el mundo se ha ido del cementerio, el alma retorna a su cuerpo.
El periodo comprendido entre el momento en que somos enterrados en la tumba y el Día del Juicio es llamado Barzaj.
El primer día y la noche después del entierro son las más difíciles. Será la segunda parte de nuestro viaje hacia el Paraíso. Será tiempo de examen para comprobar si estamos bien preparados para nuestro viaje. Nuestro éxito o fracaso dependerá de nuestra fe y de las acciones que llevemos con nosotros.
Un vez que nuestra alma retorne al cuerpo dos Ángeles amenazantes -Munkir y Nakir- se presentarán. Vendrán a visitarnos para preguntarnos sobre nuestra fe y nuestras acciones. Será una etapa terrible de nuestro viaje. Para las personas piadosas que tengan buenas acciones Allah (swt) envía a la vez a dos ángeles más -Mubashir y Bashir- para ayudar a relajarnos y poder responder con calma.
Los ángeles -Munkir y Nakir- realizarán a cada uno primero estas seis preguntas:
Todo el mundo, kufares, musulmanes o no-musulmanes y mu’minin tendrán que responder a estas seis preguntas, pero sólo los mu’minin lo podrán hacer correctamente. Los otros no serán capaces de hacerlo y sus almas serán separadas de nuevo del cuerpo y llevadas a un lugar llamado Wadiu Barhut (el Valle de las Desgracias). Este lugar es como un mini-Infierno, y la persona sufrirá allí de la misma forma que en el Infierno, pero en un grado más atenuado.
¿Se puede ayudar a reducir el castigo de nuestros seres queridos que quizás estén el Valle de las Desgracias?. Sí, realizando sus oraciones y sus ayunos incumplidos, recitando el Fatiha para ellos, o haciendo buenas acciones en su nombre.
A los mu’minin que respondan correctamente a las preguntas iniciales se les realizarán otras tres sobre sus acciones:
Los mu’minin que respondan a las nueve cuestiones manera satisfactoria, verán que su alma es llevada a un lugar llamado Wadius Salam (el Valle de la Paz), que es como un pequeño Paraíso. La persona gozará allí de los mismos placeres del Paraíso, pero en un nivel menor. Habrá bellos palacios, jardines, ríos, alimentos deliciosos, etc.… Los venturosos vivirán allí con gran bienestar y paz hasta el Día del Juicio, y estarán autorizados a visitar a sus familiares vivos cuando lo deseen.
Los mu’minin que no respondan a estas preguntas de forma satisfactoria caerán en la desgracia. Serán castigados en la tumba. Este castigo se llama la presión de la tumba. Cuando esto ocurre, los muros de la tumba se contraen para presionar al mu’min.
La siguiente historia de la vida del Profeta (PBd) nos habla sobre “La presión de la tumba”.
El Profeta Muhammad tenía un compañero llamado Sahab. Era una de sus más respetados compañeros. Rezaba, predicaba y seguía al Profeta donde fuese. Cuando murió el propio Profeta (PBd) le hizo el ghusul, le puso el kafan y realizó el salat mayid para él. Ayudó a llevar su cuerpo y lo enterró en el cementerio de Yannatul Baqi.
Allah (swt) envió miles de Ángeles del Paraíso para tomar parte en el salat mayid y en el entierro de Sahab debido a su alta posición.
Después de haber enterrado a Sahab en la tumba, abandonaron el cementerio. El Profeta, cuando se marchaba volvió la vista hacia la tumba de Sahab. Las lágrimas empezaron a brotar de sus ojos. Las gentes que lo acompañaban preguntaron por qué lloraba. Respondió que Sahab se encontraba recibiendo el castigo de la tumba y que lo oía como pedía ayuda. Sahab estaba siendo aplastado en la tumba. Aullaba de dolor. Todo el mundo quedó sorprendido al oír esto. Un hombre como Sahab ¿era castigado tan severamente en la tumba?. El Profeta (PBd) explicó que Sahab era castigado porque desobedeció una de las órdenes de Allah (swt). No se ocupaba de su madre. No se cuidaba de su anciana y enferma madre. Sahab era pues castigado por su pecado mayor. Después de lo cual, seria recompensado por todas sus buenas acciones.
Nuestro viaje, que comienza después de la muerte, pasa por la tumba, el Valle de la Paz o de la Desgracia. La explanada del Día del Juicio. El puente del Infierno, y finalmente -insha Allah- el Paraíso.
El viaje se volverá difícil a causa de nuestras malas acciones. Allah (swt) castiga a los pecadores en las distintas etapas del viaje, y a los peores los dirigirá al infierno y terminarán allí sufriendo durante años.
Allah (swt) ama a los mu’minin y quiere ayudarles tanto en la vida como en la muerte. No desea ver a los mu’minin sufrir en la explanada del Día del Juicio ni en el Infierno. ¿Por qué Allah (swt) no quiere esto? Porque en estos dos lugares estarán presentes los kufar, y a causa de su amor y respeto por los mu’minin, no quiere insultarlos castigándolos ante ellos. Allah quiere castigarnos por nuestros pecados en secreto, cuando estamos solos, es decir en el instante de la muerte, en la tumba o en el puente del Infierno (por el que no pasaran los kufar) Por eso cuando un mu’min es castigado por el Ángel de la Muerte o en su tumba, nadie puede oír sus sufrimientos.
Los kufar serán castigados principalmente sobre la Explanada del Día del Juicio y en el Infierno, pero... ¿qué ocurre con los kafirs que han hecho buenas acciones en su vida? Conocemos a muchos kufar que dan en obras de caridad, ayudan a los necesitados, se ocupan de sus padres… ¿No serán recompensados por estas buenas acciones? Sí, lo serán. Serán dispensados del severo dolor de la muerte y de la tumba. Ciertos kufar gracias a sus buenas acciones excepcionales, tendrán una remisión en la Explanada del Día del Juicio, pero ningún kufar estará autorizado a ir al Paraíso. Serán todos echados al Infierno, aunque allí los castigos no son igual para todos. La severidad del castigo dependerá de nuestras acciones.
En definitiva hermanos, nadie sabe el día o el momento que el ángel Israfil soplará la trompeta que causará la muerte de toda cosa viviente. Él volverá a soplar la trompeta, y todos los muertos resucitarán para el Juicio Final. Repasemos nuestros actos y valoremos dónde podríamos encontrarnos hasta el día de Quiyamat.
El Día del Juicio durará miles de años. El sol descenderá muy bajo y la tierra estará recalentada como un cuero al rojo.
La justicia seguidamente será impartida y cada uno será pagado según sus actos, por eso, esforcémonos en esta vida para que nuestros actos sean positivos y muchos, para que nos ayuden a tener un transito placentero durante nuestro definitivo viaje.
El Santo Corán dice en la aleya 34 de Surat Luqman:
إِنَّ ٱللَّهَ عِندَهُ ۥ عِلۡمُ ٱلسَّاعَةِ وَيُنَزِّلُ ٱلۡغَيۡثَ وَيَعۡلَمُ مَا فِى ٱلۡأَرۡحَامِۖ وَمَا تَدۡرِى نَفۡسٌ۬ مَّاذَا تَڪۡسِبُ غَدً۬اۖ وَمَا تَدۡرِى نَفۡسُۢ بِأَىِّ أَرۡضٍ۬ تَمُوتُۚ إِنَّ ٱللَّهَ عَلِيمٌ خَبِيرُۢ
Innallaha ‘indahu ‘ilmussa’ati ua iunaççilul gaiza ua ia’lamu maafi alarhaami ua maatadri nafsun maadaa taksibu gadan ua maatadri nafsun baai ard tamuutu innallaha ‘alim jabirun
«En verdad Dios posee el conocimiento de la Hora. Él hace descender la lluvia y Él sabe lo que hay en el seno materno. Y nadie sabe lo que le espera mañana, y nadie sabe en qué tierra morirá. En verdad Dios es Sabio y está verdaderamente informado»
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UAL ‘ASR...
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2ª Parte: Sobre la “crisis” económica y recortes de Zapatero
اَللّـهُمَّ اِنّي اَفْتَتِحُ الثَّناءَ بِحَمْدِكَ، وَاَنْتَ مُسَدِّدٌ لِلصَّوابِ بِمَّنِكَ، وَاَيْقَنْتُ اَنَّكَ اَنْتَ اَرْحَمُ الرّاحِمينَ في مَوْضِعِ الْعَفْوِ وَالرَّحْمَةِ، وَاَشَدُّ الْمُعاقِبينَ في مَوْضِعِ النَّكالِ وَالنَّقِمَةِ، وَاَعْظَمُ الْمُتَجَبِّرِينَ في مَوْضِعِ الْكِبْرياءِ وَالْعَظَمَةِ،
Allahumma ini aftatihu azzana’a bihamdika. Ua anta musaddidu lissauaabi bimmanika. Ua aiqantu Annaka anta arhamu al rahimin fi mauadhi’i al ‘afui ual rahmati. Ua ashaddu al mu’aquibin fi maudhi’i annakaali ua annaqimati. Ua a’thamu almutayabbirin fi mauadhi’i alkibria’i ua al’athamati.
¡Allahumma!, comienzo el elogio con Tu alabanza, pues eres Tú quien conduce infaliblemente y por Tu Gracia, hacia la verdad, y porque he llegado al convencimiento de que Tú eres el más Clemente de los clementes cuando se trata del Perdón y la Misericordia. El más firme de los que castigan, cuando se trata del Castigo y de la Venganza. Y el más Grande de los grandes, cuando se trata de la Gloria y la Majestad.
اَللّـهُمَّ صَلِّ عَلى مُحَمَّد عَبْدِكَ وَرَسُولِكَ، وَاَمينِكَ، وَصَفِيِّكَ، وَحَبيبِكَ، وَخِيَرَتِكَ مَنْ خَلْقِكَ، وَحافِظِسِرِّكَ، وَمُبَلِّغِ رِسالاتِكَ
Allahumma salli ‘ala muhammad ‘adika ua rasulika. Ua aminika. Ua safiika. Ua habibiika. Ua jiaratika min jalqika. Ua hafithisirrika. Ua muballigi risalatika.
¡Allahumma!, Bendice a Muhammad Tu siervo y Tu Profeta, Tu confidente, Tu elegido, Tu bien amado y la mejor de Tus criaturas, el guardián de Tu secreto, el que comunica Tus mensajes.
اَللّـهُمَّ وَصَلِّ عَلى عَليٍّ اَميرِ الْمُؤْمِنينَ، وَوَصِيِّ رَسُولِ رَبِّ الْعالَمينَ
Allahumma ua salli ‘ala ‘aliin amir al mu’minin. Ua uasii rasuli rabbi al ‘alamin.
¡Allahumma!, Bendice también a Tu servidor ‘Ali, ‘Amir al mu’minin, heredero del Mensajero del Señor de los Mundos.
وَصَلِّ عَلَى الصِّدّيقَةِ الطّاهِرَةِ فاطِمَةَ سَيِّدَةِ نِساءِ الْعالَمينَ
Ua salli ‘ala assiddiqati at tahirati fatima saiidati nisa’i al ‘alamin.
Bendice también a la Verídica y Pura Fatimat az Zahra, Señora de las mujeres del universo.
وَصَلِّ عَلى سِبْطَيِ الرَّحْمَةِ وَاِمامَيِ الْهُدى، الْحَسَنِ وَالْحُسَيْنِ سَيِّدَيْ شَبابِ اَهْلِ الْجَّنَةِ
Ua salli ‘ala sibtai alrrahmati ua imaamai alhuda. Al hasan ual husain saidai shabaabi ahlil yannati.
Bendice también a los dos niños de la Misericordia, los dos Imames del Camino Recto, Hasan y Husein, Señores de los jóvenes del Paraíso.
وَصَلِّ عَلى اَئِمَّةِ الْمُسْلِمينَ، عَلِيِّ بْنِ الْحُسَيْنِ، وَمُحَمَّدِ ابْنِ عَلِيٍّ، وَجَعْفَرِ بْنِ مُحَمَّد، وَمُوسَى بْنِ جَعْفَر، وَعَلِيِّ بْنِ مُوسى، وَمُحَمَّدِ بْنِ عَلِيٍّ، وَعَلِيِّ بْنِ مُحَمَّد، وَالْحَسَنِ بْنِ عَلِىٍّ، وَالْخَلَفِ الْهادي الْمَهْدِيِّ، حُجَجِكَ عَلى عِبادِكَ، وَاُمَنائِكَ في بِلادِكَ صَلَاةً كَثيرَةً دائِمَةً
Ua salli ‘ala aimmati al muslimin. ‘ali ibn alhusain, Ua muhammad ibn ‘ali, ua ya’far ibn muhammad, Ua musa ibn ya’far. Ua ‘ali ibn musa. Ua muhammad ibn ‘ali. Ua ‘ali ibn muhammad. Ua Hasan ibn ‘ali. Ua aljalafi alhadi al mahdii. Huyayika ‘ala ‘ibadika. Ua umana’ika fi biladika salaatan kaziratan da’imata.
Bendice también a los Imames de los musulmanes: ‘Ali Ibn al Husein, Muhammad al Baqir, Ya’afar as Sadiq, Musa al Kazim, ‘Ali ar Ridha, Muhammad al Yauad, ‘Ali al Hadi, al Hasan al Askari y el Sucesor. Son Tus evidencias para Tus siervos y Tus confidentes en Tu nación (la tierra). Bendícelos, mucho y siempre.
اَللّـهُمَّ وَصَلِّ عَلى وَلِىِّ اَمْرِكَ الْقائِمِ الْمُؤَمَّلِ، وَالْعَدْلِ الْمُنْتَظَرِ، وَحُفَّهُ بِمَلائِكَتِكَ الْمُقَرَّبينَ، وَاَيِّدْهُ بِرُوحِ الْقُدُسِ يا رَبَّ الْعالَمينَ
Allahumma ua salli ‘ala ualii amrika alqa’imi almu’ammali. Ua al’dli almuntathari. Ua huqqahu bimala’ikatika almuqarrabin. Ua aiidhu biruhi alqudusi ia rabba al’alamin.
¡Allahumma!, Bendice igualmente al Tutor de Tu Orden (precepto), al Qa’im, el Levantador esperado y el Justo esperado. Rodéalo de Tus ángeles, los más próximos a Tu Gloria y sostenlo por el Espíritu Santo, ¡oh, Señor de los Mundos!.
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Hermanos, temamos a Allah con el temor de los esperanzados y afirmémonos en el Islam. Aferrémonos al asidero más firme.
No soy economista. Es más, no tengo ni idea de economía. Lo que sí tengo son ya algunos años, y algunos años en la vida laboral. Los suficientes como pasa saber que todo esto que en los últimos meses se ha dado en llamar “Crisis”, no es más que una mentira más del propio sistema capitalista.
El diccionario de la RAE define “crisis” como una mutación importante, un cambio brusco.
Lo que estamos viviendo no se debe a ningún cataclismo, ninguna guerra imprevista y descontrolada. No, escuetamente y por simplificar, no es más que el momento en que los poderosos de la economía mundial hacen caja.
Y en medio de esta “crisis” nos sale ese gran estadista, ese político sin par, José Luis Rodríguez Zapatero, ese que un día decía que la crisis afectaba al mundo pero no afectaría a su España, y al día siguiente tenía que admitir que esa “crisis” mundial también le había dado un palo a su España. Ese que decía que el problema de Grecia era sólo de Grecia y que su España, por supuesto, no estaba en ninguna situación parecida, a la semana siguiente se ha sacado un decretazo para cuadrar cuentas, que no tiene por menos que hacernos recordar aquello de las barbas del vecino.
Y para cuadrar esas cuentas que parece que no cuadran en su España, ese faro del progrerío, esa musa del movimiento gay internacional, ese adalid de la clase obrera, ha hecho gala de sus grandes principios y para que dos y dos le sumen cuatro, se ha armado de dureza y ha ido al cuello de... no, la banca no, ¿los especuladores económicos internacionales? no, ¿de los grandes burgueses? no, al cuello de los pensionistas y de los empleados públicos, esas peligrosas castas causantes del mal de su España. Seguro que si aquel paisano de ZP -Buenaventura Durruti- levantara la cabeza, le dedicaría algunas palabras bien acertadas a la valentía del chico de la ceja.
Recortando el sueldo de los empleados públicos y congelado las pensiones este abanderado de la política de la cosmética pretende ahorrar 6.000 millones de euros. Si no fuera porque conocemos la historia del Partido Socialista, desde cuando colaboraba con la dictadura de Primo de Rivera, nos llevaríamos las manos a la cabeza al ver una medida como esta tomada por un gobierno que se autocalifica de izquierda. Ya se decía en los años 30 que la gran aspiración del socialismo no era acabar con el capitalismo, sino ganarse su confianza para este le permitiera ser su administrador.
Zapatero se ensaña con las dos clases más débiles que ha encontrado. Los pensionistas por su propia naturaleza, y los empleados públicos, por ser el gremio, que a pesar de tener en su mano la capacidad para paralizar un país entero, es el más sumiso, servil y rastrero que puede encontrarse en toda la antaño llamada clase obrera.
La Iglesia recibe del estado por diferentes conceptos más de 5.000 millones de euros anuales, de los que sólo el IRPF y el pago de los profesores de religión, alcanza la cantidad de 800 millones de euros. Por supuesto a Zapatero no se le ha pasado por la cabeza tocarle un céntimo a la Iglesia.
Los gastos militares, sólo en presupuesto del Ministerio de Defensa y sus organismos autónomos es de 8.800 millones de euros, a los que se podrían sumar los 950 millones que se gastan en investigación militar en el Ministerio de Industria. En jugar a mamporrero del imperio, lo que oficialmente se llama participación en misiones internacionales de “paz”, se gastan 950 millones al año. Por supuesto a Zapatero no se le ha pasado por la cabeza tocarle un céntimo a su Ejército, ni, por supuesto, negarle a su querido Obama sus soldaditos por el mundo.
Subvencionar entidades tan parasitarias como los partidos políticos y sindicatos cuesta más de 400 millones al año. Por supuesto a Zapatero no se le ha pasado por la cabeza tocarles..., mejor dicho, tocarse ni un céntimo.
El Estado ha aportado a la Banca con cargo a los Presupuestos Generales de 2009, a través del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria la cantidad de 6.750 millones de euros, más de lo que pretende ahorrar con su decretazo. Por supuesto a Zapatero no se le ha pasado por la cabeza tocarle ni un céntimo a la banca.
La llamada Familia Real recibe directamente de esos mismos Presupuestos Generales del Estado casi 9 millones de euros, parece que a Zapatero tampoco se le ha ocurrido tocar ni un céntimo a estos esforzados “empleados públicos”.
En definitiva hermanos, a estos políticos que tanto se les llena la boca diciendo que su vocación es el servicio al pueblo, a estos que tanto les gusta dar clases de “democracia” al mundo, no es difícil sacarles los colores y ver como su verdadero servicio es al poder, a los poderosos que los han colocado ahí para que administren y defiendan sus intereses. Lo malo es que todavía hay ilusos que piensan que su voto es el que decide. Insha Allah los musulmanes se libren de esta ceguera.
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Hermanos, pido el perdón de Allah y Su Indulgencia de para mí y para vosotros, y pido por el perdón de mis pecados y los vuestros.
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KUL HUA...
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Allahumma otorga alegría a los habitantes de las tumbas.
Allahumma enriquece a todo pobre.
Allahumma sacia a todo hambriento.
Allahumma viste a todos los desnudos.
Allahumma salda la deuda de todo deudor.
Allahumma consuela a todos los entristecidos.
Allahumma retorna a todos los extraviados.
Allahumma libra a todo prisionero.
Allahumma soluciona todos los problemas de los musulmanes.
Allahumma da curación a todos los enfermos.
Allahumma pon fin a nuestra pobreza con Tu opulencia.
Allahumma cambia nuestro mal estado con Tu buen estado.
Allahumma mantennos firmes en Tu camino, y pretégenos de la negligencia en el cumplimiento de nuestros deberes hacia Ti.
¡Allahumma, Apresura la reaparición de nuestro maestro, Imam az Zamaan, Al Mahdi (P) e inclúyenos entre sus ayudantes y soldados. Aamiim.
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Jutba pronunciada por el Presidente de la Comunidad Islámica Duodecimana Baiatullah, Mikail Alvarez Ruiz